Muchas mamás que acuden a la consulta me cuentan que desde que dieron a luz tienen dolor en las relaciones sexuales. Algunas saben que eso no puede ser normal, pero muchas ignoran su “ instinto” y hacen caso a las nada correctas opiniones de su alrededor que dicen que sí, que es normal, que les durará mucho tiempo, y que es lo que toca.
Como os digo siempre en clase… ¡Me tiro de los pelos!
Nunca la dispareunia debe ser normal. En realidad nunca el dolor, sea de donde sea, debe ser normal.
El dolor es nuestro aliado para saber que algo no funciona correctamente y hay que escucharle y saber interpretarlo.
¿A qué se puede deber el dolor en las relaciones sexuales en el postparto? La mayor parte de las mujeres que sufren de dispareunia ( así llamamos a este tipo de dolor ) han pasado por partos instrumentalizados con fórceps, ventosas o episiotomías, y estas pueden ser las causas de ese dolor. El uso de fórceps y ventosas puede producir desgarros, distensiones y activación de puntos dolorosos en el suelo pélvico ( tanto a nivel superficial como profundo ) e incluso hematomas bastante aparatosos. De la episiotomía que vamos a contar que ya no se sepa ( no voy a entrar en debates sobre su idoneidad pues da para mucho ). Que es una cicatriz, a veces más reducida en su tamaño y otras veces más extensa, y que como cicatriz que es puede fibrosarse, inflamarse y crear adherencias generando dolor. Muchas mujeres dicen que notan “ como si algo estuviera muy tenso y se fuera a romper “ o como “ una goma a punto de estallar”. Si notas esto y tienes episiotomía es muy probable que este fibrosada o haya formado adherencias. Muchas veces también se percibe esa sensación con desgarros.
Los partos con baja o nula intervención, sin episiotomía o desgarros también pueden tener como consecuencia la dispareunia. Aunque es cierto que suele ser menos frecuente no es imposible. El propio mecanismo del parto y el expulsivo en su naturalidad y normalidad puede producir distensión de la musculatura pélvica con la consiguiente activación de puntos dolorosos o puntos gatillo.
¿ El dolor también puede estar presente más allá de las relaciones sexuales? Por supuesto que hay muchas mamás que tienen este dolor de manera continua, al sentarse, al levantarse, al caminar… Tampoco es normal. El dolor nunca es normal. Debemos buscar la causa (Sobre el dolor postparto de manera más generalizada puedes echar un vistazo a la anterior entrada del blog).
¿Y si se trata de una cesárea? Te sorprenderá leer que más mujeres de las que nos imaginamos también sufren de dispareunia tras una cesárea y puede ser fruto de la cicatriz y activación de puntos dolorosos en musculatura abdominal que irradien dolor al periné y que duelan en la penetración.
Nunca debes pensar que el dolor es normal. Ya sabes que tienes que tomártelo como una señal del cuerpo de que algo no está bien y este tipo de dolores responden realmente bien al tratamiento con fisioterapia especializada de tu suelo pélvico.
¡Espero haberte ayudado!
(Recuerda que toda la divulgación que se lleva a cabo a través de este blog tiene como respaldo la evidencia científica y la experiencia clínica, la cual puedes solicitar si así lo consideras poniéndote en contacto conmigo)